“Sonia, como una comadrona de almas, me ha ayudado a «parir» otros yo; a reconocerlos, a escucharlos, a entender sus razones, aceptar sus defectos, valorar y reconocer sus fortalezas, apreciar y agradecer sus esfuerzos… Y lo mismo he aprendido a hace con mis partners profesionales, colaboradores o clientes, compañeros o jefes. El liderazgo sano, sostenible e inspirador creo que necesita justamente esto: escuchar, comprensión, reconocimiento y agradecimiento…¡La motivación llegará sola!”